Cómo llegué a acá?

   Siento que voy a llorar, que alguien me explique algo por Dios. Abrí los ojos en un hotel, desnuda, con el celular pegado a la oreja y un mensaje de mi abuela que decía: Venís a dormir a casa? Cómo no le respondí a mi abuela?! A mi abuela!!!!!! Dios mío, soy la peor escabiona del mundo. Denis hija de re mil puta esa pepona que nos diste.

   Me siento una violada, pero sé que no. Lo hice con toda mi voluntad estoy segura. Le dije al flaco, "seguro te re chapé en este ascensor" y me dice: jajajajajajjajajajaja ni me hagas acordar. Jajajajajajajaja me muerooo años que no me pasaba esta secuencia de pendejita jajajajajajajjajajaja....

Me voy a dormir que tengo que ir a trabajar en 3 horas.

Otra pelea más

   Cuando empezamos a estar juntas decidí que por primera vez iba a dejar de lado mi orgullo, mil mal carácter, mi prepotencia y esas cosas que tengo que me hacen arrepentir un millón de veces. Cada vez que discutimos repondo que no tengo ganas de discutir, que la distancia ya es lo suficientemente desgastante como para que encima discutamos todo el tiempo por cosas sin sentido. Después me doy cuenta que busca enojarme para notar mi cariño, para que le diga que la quiero, que no quiero perderla, que no me gusta pelear con ella. Me llena los huevos, me roba la poca paciencia que tengo; pero la quiero tanto, tanto que no me jode y la sigo aguantando. A ella, a sus enojos sin fundamente, a sus puteadas, a sus escenas para darme celos. La quiero entera. Es una idiota, pero me encanta. Y yo también soy una idiota, sino no escribiría sobre Julia.

Don't let me down and down

Éste tema lo escribió Bowie para que un día como hoy se lo dedicara.

Still I keep my love for you

No place to hide no way to fall

Nowhere to lie no world so wide

I'm sick and tired of telling you

Don't let me down and down and down

Don't let me down and down and down

I know there's something in the wind

That crazy balance of my mind

What kind of fool are you and I?

Scared to death and tell me why

I'm sick and tired of telling you

Don't let me down and down and down

Don't let me down and down and down

Still I keep my love for you

You made a date with destiny

You jog-jog in my memory

You haunt in mind not fade away

I'm sick and tired of telling you

Don't let me down and down and down

Don't let me down and down and down

I'm sick and tired of telling you

Still I keep my love for you

No place to hide, no way to fall

Nowhere to lie no world so wide

I'm sick and tired of telling you

Don't let me down and down and down

Don't let me down and down and down

Disfruten a este maravilloso artista: 

http://www.youtube.com/watch?v=AP2UYenMNsg&feature=related

Mi paciencia tiene un límite

   Me levanté -una vez más- víctima de su mal humor. Pero hoy sonó el peor de los temas mientras la escuchaba.  Hoy dije "Te quiero, pero mi paciencia no es tan grande". La despedí con un tema que salió en el noticiero y decía: 

Creo que esto no va más, no existe forma, 

no hay modo que podamos continuar 

¿para qué? No va más.

Y la tormenta trajo al huracán que se lo llevo todo, 

y dejó barro, y dejó soledad pero sembraré y algo crecerá.

Y lo que dices es ilógico, lo haces tan dramático, 

todo lo vuelves tan caótico cuando el problema es básico.

Creo que esto no va más, ya hemos intentado todo,

el mismo juego vuelve a comenzar una y otra vez, no va más.

Lo que asusta es la soledad y volver al desorden 

pero en la noche siempre hay lugar para estar y olvidar.

(Andando descalzo - ilógico)

   No escucho este tipo de música, pero me pareció sabia y es de la que ella entiende. Si bien le dediqué uno de Bowie no creo que lo entienda, no por que sea una idiota, sino por que con tal de hacerme la contra en estas estupideces es capaz de no escuchar el tema y no entender jamás el mensaje que yo no supe redactarle.

   Podría haber sido muy buena para mí, pero se dejó ganar por la inmadurez, la idiotez y sobretodo el miedo. Aunque es muy posible que mañana vuelva a escribir poemas en su nombre, hoy me agotó asquerosamente.

   ¿Cuándo va a llegar el día en que pueda presentarles a Lucia, Leonardo y Darío alguien como la gente? ¿Alguien "normal"? Quiero salir con alguien estable que no tenga tendencias suicidas u homicidas, alguien que pueda discutir y saber cuando parar, no es tan difícil lo que pido. Quiero pegar una, UNA vez! 
-Silvana no podía asumir que el sexo convertía a una amistad en una relación, así que por dos años me cogí a "mi mejor amiga";
-a Sonia me daba vergüenza presentarla como MI relación, no habla bien de mí, pero de las puertas de su dpto para afuera Sonia y yo no podíamos ser pareja; 
-Noemi si no hubiese sido por sus depresiones constantes, sus bajas de autoestima, su represión masiva y demás, podría haber sido el amor de mi vida. Tiene todo lo que siempre busqué, es una pollera elegante, femenina, tiene una buena figura y una piel blanca de porcelana. Su sonrisa es contagiosa, y el poco tiempo que me hizo feliz, lo hizo mejor que ninguna. 
-Julia apareció de la nada y era muy buena para ser verdad: torta asumida, 20 años, estudiante y con trabajo, a dos pasos de independizarse, canchera, bonita, divertida. Lástima que las nenas caprichosas de primaria no sean muy de mi estilo.

   Yo tengo 19 años y me la doy de langa; no busco un contrato prenupcial que después no pueda cumplir, pero quiero una mujer para pasarla bien, no puede ser tan difícil. Vivo en Mar del Plata por el amor de Dios! Tampoco vivo en mi pueblo inmundo donde es imposible que resida gente interesante. Salgo a la calle y estoy rodeada de tortas, cómo puede ser que siga esperando y esperando?

Mar del Plata ponete las pilas; antes de fin de año quiero una novia como la gente.

Que el miedo jamás le gane al deseo.

Amén.

She will be MY living end

   Conocerla fue el final de mi paz. Y el miedo que tuve antes de verla fue la paz que anuncia la tormenta. Los segundos previos a la cita a ciegas, dentro del ascensor, recé por que físicamente no me gustara. Pero para mi desgracia al abrir la puerta el paisaje fue mucho más perfecto de lo que había podido imaginarme del otro lado de la computadora.

   Conocerla sí, fue remover la tierra oscura de los dos años más tristes y felices de mi vida. La caminata hasta la universidad, los desafíos del camino, su risa, todo mejor de lo que lo había imaginado. En cuanto probé sus besos, y percibí la próxima adicción, me tembló el cuerpo con sólo pensar en repetir historias. "Si ésta vez no me jugaran tan mala pasada" fue en lo único que pensé toda la noche mientras la veía, y la siguiente, y las siguientes a esa.

   Si te "enamoras" de una persona completamente por su esencia, y cuando por fin la ves cara a cara la química es impresionante, está bien sentir miedo. Miedo a querer, a querer en estas circunstancias. Y yo no quería querer más así, había prometido que después de la primera vez no iba a haber una segunda. Y acá estoy, queriéndola. Una promesa más que sale de mi boca directo al olvido. 

   Me dicen que es rápido para quererla, pero no la conocen. La quiero por que es excepcional, es genuina, y creo que en eso se basa la mayor parte de su encanto. Me acostumbré a salir con mujeres vacías que compartían mis gustos, mis ideologías, y que si así no era cómodamente se adaptaban y terminábamos ahogándonos en la simpleza de la aburrida monotonía. Pero ella es diferente. Decidida, sin vacilaciones: asiente o se niega; comparte o duramente crítica. No tiene miedo, y yo le temo (muchísimo). 

   Le temo a todo su ser; a su cuerpo que me ata, a sus ojos que me desafían, a sus manos que me tientan todo el tiempo, al perfume de su cuello, a sus besos adictivos, y a sus enojos que duelen. Le tengo miedo a su inmadurez y sobretodo a la mía. En cada pelea aprendí a callarme, y en cada pelea soy otra; dejo de ser quién siempre fui para ser quién siempre quise ser. Actúo para no lastimarla, para que no me lastime, para que una simple discusión tan insignificante no se convierta en algo sin marcha atrás.

   Dice cosas que me hieren y las paso por alto, por que en la distancia no existe el cachetazo, el beso con lujuria y la pronta reconciliación. La distancia es compañera de los teléfonos apagados, de las noches de borrachera y sobretodo fiel amiga de la venganza. Por eso la cuido para cuidarme. No quiero perderla, y no sé perdonar, no todavía.

   La noche que dormimos juntas la llevé a uno de los peores lugares de San Telmo por que otra no quedaba. Entre las luces de neón y la cara del recepcionista entré con un miedo en el pecho del que me hubiese gustado que ella jamás se enterará. Me porté como un caballero aunque le gusten las damas; y una vez en nuestra cama las cosas se pusieron tan difíciles como en algún momento previo a la situación ya lo había imaginado.. Todo, pero absolutamente todo, servía para distraerla: el frío, las sábanas, la música, el ambiente, el latir de mi pecho y hasta la ubicación del televisor.

   Entonces, como si Norma Aleandro me hubiera heredado sus genes artísticos, me levanté de la cama, prendí un cigarrillo y me senté en el extremo más lejano a su presencia. Esquivé -con dolor- sus besos y sus caricias, hasta fui capaz de decirle que prefería irme y entonces por fin bajó los brazos dejando salir de su boca un "Hasta acá llegó mi orgullo". Al mismo tiempo que bajaba de la cama empezó a ponerse la ropa, mientras yo la miraba desde lejos con cara de indignada y un deseo que me prendía fuego por dentro. Quería que enserio se olvidara del lugar en el que estábamos y le diera más importancia a nuestra compañía mutua. Había soñado (literalmente) tantas veces esa noche que a mí realmente no me importaba que durmiéramos en una caja de zapatos. 

   Terminó de abrocharse la campera, esperé el momento justo (el momento que te enseñan las películas) y fue cuestión de caminar sobre la cama, acercarme hasta su boca, acorralarla contra la pared y comenzar a desvestirla para que la noche de una vez por todas empezara.

   Ingenuamente pensé que al menos una de diez caricias no iban a gustarme, que sus gesticulaciones iban a bajar mi lívido; pensé que sería historia de una noche y jamás volver a vernos. Pensé que iba a poder dejarla ahí dormida con una nota en su mesa de luz. Pensé mal; como siempre. Desde su primer respiro en mi oreja, es mía. Desde que perdí la vista de sus manos, es mía. Desde que dormí con mi pecho contra su espalda y su mano sobre la mía, se convirtió en mi tesoro, en pertenencia. Y aunque esté lejos, aunque otras noches sea de todas, aunque la haya tenido a penas una noche conmigo. Es mía por que se convirtió en mis 24hs., en mi peor escena de celos, en mi inseguridad diaria, en mi sonrisa constante, en mi motivo. 

   Con un leve esfuerzo puedo imaginarla todas las noches en mi cama, todas las tardes en mi camino, cocinando en mi cocina, o comprando en el chino de abajo. Puedo escuchar su voz cuando la leo, y sentirla con apenas cerrar los ojos. Es mía por que ella me encontró y hace tiempo espero ELLA que me buscara.

   Y aunque hoy durmamos de espaldas por su enojo, y aunque mañana tenga que remarla con muchas ganas; aunque no sepa pedir perdón ni quiera insistirle, es mía y no puedo dejarla.

Buenas noches mi amor,
hoy imagino tu 'hasta mañana'.

'Quiero hablarle de mi amor pero ella da la espalda y se va'

  Hoy la ví. Después de planear noches enteras nuestro encuentro, por casualidad nos cruzamos. Fingí indiferencia, desinterés. Hice como si no pasara absolutamente nada, pero nunca mi mundo se derrumbó con semejante facilidad. Ya no sé si la quiero, si la odio, si la necesito o la extraño. No sé si besarla o golpearla. Los pocos segundos que la tuve enfrente mi ser se dividió por completo. La ví bailar bajo las luces de colores con una de esas polleras que tanto me fascinaban y no sabía si acorralarla y hacerla mía, o de una vez por todas superarla.

   Quería llorar. Quería preguntarle un montón de cosas, si era de piedra, o yo era invisible. Si nunca había sentido nada, cuánto había fingido, cuánto había sentido. Me quiso de verdad alguna vez? Me moría por besarla, me moría por sentir esa sensación que solamente sus besos me regalaban, esa comodidad, ese calor. Cómo puede haber tanta distancia entre nosotras después de haber estado tan cerca? Mi promesa fue volver a buscarla, y acá estoy otra vez con el corazón de lata abollado; y acá estoy otra vez negando quererla para no tener que matarla. Y ahora finjo mejor que ella el dolor que siento, reprimo mis energías, mis ganas. 

Y si no le digo cuánto la quiero es por que ya entendí su basta.

Hace tiempo que vivo por ella, y es momento de empezar a vivir por mí.